Durante 14 años la periodista mexicana Lydia Cacho ha sido perseguida por haber denunciado la red de pederastia del empresario Jean Succar Kuri y otros 18 funcionarios públicos y empresarios. Su lucha parece estar a punto de ser recompensada luego de que el pasado 11 de abril de este 2019 se giró por fin la orden de aprehensión en contra de sus torturadores.

La historia data desde 2003, cuando un grupo de mujeres y niñas denunciaron penalmente a Jean Succar Kuri en Quintana Roo por abuso sexual y pornografía infantil. Lydia Cacho investigó y documentó el tema en un libro que fue publicado en abril de 2005: “Los Demonios del Edén”.

Desde entonces políticos y empresarios se coludieron para detenerla, torturarla y amedrentarla por haberse “atrevido” a revelar la historia.

La implicación más escandalosa fue la del exgobernador de Puebla, Mario Marín, quien como un favor a Kamel Nacif ordenó la detención de Lydia Cacho en Cancún y su traslado a Puebla, en condiciones infrahumanas.

La Fiscalía General de la República busca hoy a Mario Marín Torres; los empresarios Kamel Nacif y Juan Nakad; el exjefe de la Policía Judicial, Adolfo Karam; y Juan Sánchez Moreno, por el delito de tortura. Esto luego de que la periodista ganó el caso ante la Organización de las Naciones Unidas, que ordenó al Estado mexicano ofrecer una disculpa pública y detener y castigar adecuadamente a los responsables.

Cronología

En octubre de 2003 un grupo de niñas y mujeres denunciaron penalmente a Jean Succar Kuri, alías “El Johny” por violación, abuso sexual de menores y pornografía infantil.

El juez dicta una orden de aprehensión en su contra pero Succar huyó hacía Los Ángeles, California.

La periodista Lydia Cacho recibe las primeras amenazas de muerte por parte del empresario hotelero de origen libanés, y lo denuncia ante la entonces PGR.

Las víctimas de Succar son perseguidas y amenazadas de muerte. Levantan sus quejas ante la Comisión Estatal de Derechos Humanos en Quintana Roo y ante la Comisión Nacional de Derechos Humanos.

En 2004 Succar Kuri es detenido en Arizona, Estados Unidos, en 2006 fue extraditado a México y cumple una condena de 112 años en prisión por pederastia.

Succar Kuri consigue llevar a sus víctimas a retractarse, lo hace ante notario, aunque no tienen validez las declaraciones. Kamel Nacif declara ante los medios de comunicación que él paga la defensa de Succar.

El 16 de diciembre de 2005, Lydia Cacho es detenida y torturada por un grupo de policías judiciales. La trasladan por tierra de Quintana Roo a Puebla.

Las sábanas telefónicas de Casa Puebla, residencia oficial del gobernador, muestran llamadas cruzadas entre los judiciales, el entonces gobernador y Blanca Lidia Villeda.

“Juanito” Nakad Bayeh orquesta las amenazas de golpes y violación de las que fue víctima Lydia Cacho en la cárcel. En ese entonces el empresario textilero tenía maquilas en el penal de San Miguel y por ello contaba con contactos para hacerlo.

El 21 de diciembre de 2005, Lydia Cacho recibe el auto de formal prisión por los delitos de Difamación y Calumnia. Unos días después ese delito queda eliminado, por falta de elementos y más tarde logran trasladar el juicio a Quintana Roo, pues de determina que Puebla no tiene ninguna relación.

La ley señala que la fianza debía ser por un máximo de 8 mil pesos, pero se fijó en 70 mil. La sábana telefónica de la juez muestra llamadas con el presidente del Tribunal Superior de Justicia para “negociar la fianza”.

El 14 de febrero de 2006, el diario La Jornada, publicó las llamadas telefónicas entre Kamel Nacif y Mario Marín en donde agradece su intervención para la detención de la periodista. De esas llamadas nace el mote del “góber precioso”.

También se dan a conocer los audios de la llamada en la que Nacif opera con “Juanito” Nakad la violación y golpiza a Lydia Cacho en la cárcel.

En marzo de 2006, Lydia Cacho denuncia a Mario Marín Torres, Diana Laura Villeda, los policías judiciales, la juez penal Rosa Celia Pérez, Kamel Nacif, “Juanito” Naked, y quien resulte responsable, por los delitos de: abuso de autoridad, cohecho, ejercicio indebido del Servicio Público, tráfico de influencias, colusión de servidores públicos, tortura, tentativa de violación y lo que resulte.

En marzo de 2006, diputados y senadores solicitan por escrito a la Suprema Corte de Justicia de la Nación que se investigue al entonces gobernador de Puebla y a los responsables de Poder Judicial por las violaciones de Derechos Humanos y garantías individuales de Lydia Cacho.

Al mismo tiempo Amnesty Internacional, el Comité para la Protección de Periodistas, la OMCT y más de 40 organizaciones no gubernamentales se suman a la petición para la investigación.

En campaña como candidato a Presidente de la República, Felipe Calderón viene a Puebla y promete llevar a juicio político a Mario Marín Torres.

El 19 de septiembre de 2006, el pleno de la Suprema Corte de Justicia desechó la votación de siete a tres los resultados de la investigación presentada por el ministro Guillermo Ortiz.

En diciembre del 2006 se inaugura el edificio de la Judicatura en Puebla y asisten el ministro Guillermo Ortiz Mayagoitia y la Comisión designada para el caso de Lydia Cacho. En primera fila estuvo sentado el Magistrado Oscar Vázquez Marín, quien estuvo encargado de investigar a Mario Marín y las llamadas.

El 2 de octubre de 2006, el juez primero de lo penal en Quintana Roo envía el juicio de Lydia Cacho por carecer de sustento en Cancún.

El juez de lo penal en el Distrito Federal sobresee la causa penal por difamación contra Lydia Cacho. La sentencia queda ejecutoriada el 2 de enero de 2007. Queda libre de todo cargo penal.

El senador del PAN, Alejandro González Alcocer declaró el 2 de enero de 2007: “entre los casos pendientes de la Corte está la investigación sobre la presunta violación por parte del gobernador de Puebla a las garantías de Lydia Cacho”.

El 30 de noviembre de 2007, los ministros de la Suprema Corte de Justicia exoneraron al llamado “góber precioso” al señalar que no hubo conspiración entre él y Kamel Nacif para la detención y tortura de Lydia Cacho.

Con mayoría de siete votos, es designado Guillermo Ortiz Mayagoitia como presidente de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN).

El dos de agosto de 2018, el Comité de Derechos Humanos de la Organización de las Naciones Unidas resolvió que existieron una serie de violaciones a los derechos humanos de la periodista Lydia Cacho. Fue la primera vez que se resolvió el caso de una periodista con esas características en el sistema universal de derechos humanos.

La ONU pide “procesar, juzgar y castigar con penas adecuadas a las personas halladas responsables de las violaciones cometidas.

El 10 de enero de 2019, el Estado mexicano ofreció una disculpa pública a la periodista Lydia Cacho por la tortura de la que fue objeto, la discriminación en razón de género en su contra y las acciones que le impidieron acceder a la verdad y la justicia.

El 11 de abril de 2019 el Primer Tribunal Colegiado del Vigésimo Séptimo Distrito con sede en Cancún, Quintana Roo gira un orden de aprehensión contra del exgobernador Mario Marín; el empresario, Kamel Nacif; el exdirector de la Policía Judicial, Hugo Adolfo Karam; el excomandante, Juan Sánchez Moreno; y el empresario Juan Nakad.

Fuente: Periódico Central