Cuatro novedosas claves para mejorar la educación en América Latina
Fecha: 29 oct 2017
¿Qué pasa cuando algunos de los jóvenes más prometedores de América Latina aceptan el reto de dar clase en algunos de los colegios más necesitados de la región?
Esa es la pregunta a la que desde hace varios años están respondiendo organizaciones como Enseña Chile, Enseña por México, Enseñá por Argentina y los otros siete miembros latinoamericanos de la red Teach for All.
La red, que esta semana celebra su 10 aniversario, actualmente tiene presencia en 46 países de todo el mundo, incluyendo Panamá, Colombia, Ecuador, Perú, Uruguay, Brasil y Haití.
Con ligeras variaciones, todos sus miembros trabajan para tratar de convencer a los jóvenes más talentosos de sus respectivos países que dediquen al menos un par de años a la enseñanza al salir de la universidad.
Y para ello, además de capacitación y un seguimiento permanente, estas iniciativas les garantizan a estos profesores "inesperados" -por lo general destinados a escuelas en las zonas menos privilegiadas- un estipendio mensual.
El resultado es que muchos jóvenes que originalmente planeaban trabajar como banqueros, ingenieros, doctores o abogados terminan "enganchados" al mundo de la educación.
"El 97% de los jóvenes que han pasado por Enseña Chile siguen ligados al tema de una forma u otra y el 80% sigue en educación a tiempo completo", le dice a BBC Mundo su director ejecutivo, Tomás Recart. Y algo muy similar ocurre en otros países.
Pero, ¿qué pueden aprender los sistemas educativos de la experiencia de estos jóvenes?
Este hijo de banquero, que se formó como ingeniero industrial con mención en transporte, no parecía destinado a una carrera en el sector. Y él mismo admite que terminó vinculado al mundo educativo un poco por accidente.
Al terminar la universidad su prioridad era hacerse con un buen mentor y eso lo llevó a trabajar con Andrés Iacobelli, quien acabada de regresar de la universidad de Harvard a fundar el Centro de Políticas Públicas de la Universidad Católica de Chile.
"Me tocó servir de puente entre la universidad y comunas de mucha pobreza para tratar de ayudarles a resolver sus principales problemas. Y fueron los propios alcaldes los que me dijeron que el principal problema era la educación", recuerda.
Así empezó un camino que encontró su rumbo definitivo varios años más tarde, cuando en el marco de sus estudios de posgrado en Harvard asistió a una conferencia de Wendy Kopp, cofundadora de Teach for All.
"Su mensaje era: cuando tienes un sistema con muchos problemas que hay que resolver al mismo tiempo, no trates de resolverlos todos por tu cuenta", recuerda Recart.
"En lugar de eso ocúpate de construir puentes para que otra gente talentosa también se familiarice y se comprometa con esos problemas y se sume a los esfuerzos por darles solución", es su resumen de los planteamientos de Kopp.
Según el chileno, eso le hizo comprender que el problema de muchos de los que estaban tratando de mejorar la calidad de la educación "era que estábamos tratando de responder la pregunta equivocada".
"Nos estábamos preguntarnos 'qué' debemos hacer, en lugar de preguntarnos 'quién' es el que tiene que hacerlo", le dice a BBC Mundo.
Y en su caso particular su respuesta fue fundar junto a cinco amigos Enseña Chile -la primera miembro de la familia en América Latina- con la idea de atraer y formar al mejor talento disponible para enviarlo a las escuelas de los lugares con más carencias del país.
Como destaca Recart, el objetivo fundamental de la iniciativa no es necesariamente que estos jóvenes se queden en las aulas de clase, sino que salgan de la experiencia convencidos de que el problema de la educación no sólo es urgente, sino también solucionable y, sobre todo, también un problema suyo.
"El problema no son los profesores, sino un sistema que requiere de muchas manos diferentes en muchos lugares diferentes de la sociedad", le explica a BBC Mundo.
Recart también tiene claro que Enseña Chile no posee la solución a todos los problemas.
Pero desde 2009 la organización ha contribuido a la formación tanto de profesores como de tomadores de decisiones y emprendedores sociales que, desde sus trincheras, siguen peleando la batalla por una mejor educación.
2. "Para mejorar no basta con inyectar dinero"
El caso de Marcia Rivas ilustra perfectamente el efecto multiplicador de la red Enseña, pues sus dos años de experiencia en las aulas de clase informaron buena parte de su trabajo en el Ministerio de Educación de Perú.
Abogada de formación, Rivas inició el programa de Enseña Perú en 2011 y tres años después ingresó al ministerio, ocupando el cargo de directora de educación básica especial hasta el pasado 3 de octubre.
Y lo mismo se puede decir de los principales aprendizajes de su experiencia tratando de dejar su huella en la pequeña escuelita de La Manzanilla de la Paz en la que le tocó trabajar.