- La Vieja Guardia

Del periodismo analógico al digital

Fecha: 13 abr 2019

Por Marco A. Cortez Navarrete

Si de algo estoy orgulloso es haber sido parte de la generación que vivió la transición de la era analógica a la era digital en los medios de comunicación. He aquí parte de esa historia:

...“¿No te interesaría trabajar en Grupo Sipse?”, me preguntó un buen día el periodista e ingeniero Francisco Chí Lavadores, productor de esa empresa.

Aún estaba en la radio universitaria, pero, ante dicha invitación, decidí incursionar al ámbito profesional como reportero de radio y televisión de grupo Sipse, en ese entonces bajo la dirección de Gonzalo Domínguez Soto.

Fue a finales de 1979, más o menos, cuando inicié mi labor como productor del turno matutino del noticiero de la hora, en XEZ Radio 600.

Cada hora, a partir de las 8 de la mañana y hasta las 2 de la tarde, me encargaba de procesar la información enviada por los reporteros de Grupo Sipse.

En una pequeña cabina, de un metro cuadrado, con una grabadora de carrete abierto AMPEX, micrófono unidireccional y audífonos de la época de Jacobo Zabludowski, editaba y luego corría a las cabinas de la “Z”, donde el locutor en turno se encargaba de colocar la cinta y transmitir.

La información -vale la pena precisar- era recibida por medio de una grabadora de casette conectado al teléfono convencional.

Es así como se producía el noticiero más escuchado de la radio, amén que la información era utilizada también para los noticieros de televisión que conducían , además del maestro Domínguez Soto, los grandes locutores, Jacinto Herrera Diaz y Raúl Sanchez Sauri, así como la guapísima Manina Ancona Riestra.

Los conductores abordaban todo tipo de temas, desde las sociales y deportivas hasta las políticas, financieras y económicas, es decir, la formación era integral y no especializada como sucede ahora.

En ocasiones me tocaba -y disfrutaba mucho- realizar entrevistas para el noticiero de televisión. Por lo general, Gonzalo Domínguez me comisionaba para la cobertura de eventos deportivos, llámese la liga de fútbol estatal o grandes eventos de boxeo o de béisbol.

Recuerdo con mucho cariño la ocasión cuando jugaron en el desaparecido parque Carta Clara los Padres de San Diego, que traían entre sus filas al jonronero Dave Winfield, el paracorto Ozzie Smith, el bigotón Rollie Fingers, y él tercera base mexicano Aurelio Rodríguez y otro lanzador, Randy Jones, entre muchas estrellas más.

Como mi inglés era incipiente, me apoyó en la traducción Pedro Sahuí Abraham, creo entonces jefe de relaciones públicas del club. Fue un agasajo tener las exclusivas que me proponía.

Quien diría que don Pedro Sahuí, sería con los años mi tío ya que me casé con una sobrina suya. Don Pedro, es importante recordar, también fue un grande de la crónica de béisbol junto con don Felipe Escalante Ruz, Jorge “El Primo” Abraham y, desde luego, Jorge Blanco Martínez “George Withe” a quienes tuve el honor de conocer y disfrutar de su amistad.

Regresando al tema de Grupo Sipse, es necesario recordar a mis amigos reporteros Jesús Delgado Centeno, Margarita Cetz Parrao, Dalia Carrillo y Martha Tzab Magaña.

Desde luego, para hacer posible las imágenes, grabación, edición, etcétera, se contaba con Hansel Vargas Aguilar, avezado e intrépido; Florentino Zulú, Ricardo Rosado y Victor Navarrete.

Las cabinas de la XEZ Radio 600 estaban pegadas a otra (creo que actualmente es 97.7) donde habían muy buenos amigos, entre ellos Jorge Tamayo, Miguel Pérez y Luis León Alvarez. No puedo dejar de mencionar a los locutores de cabina, quienes con sus excelentes voces, experiencia y capacidad captaban el interés de los radioescuchas: Ramón Martínez, Javier Peña Palomo, Manuel Pérez Mengual y Víctor Pacheco.

Anécdotas tengo muchas, muchísimas, pero citaré solo una: fue cuando desobedecí y me subí a la antena -tenía 20 años de edad- y llegué hasta la mitad. Este hecho me costó una buena suspensión, merecida además, pero tuve una visión espectacular de la ciudad desde la canasta de la torre.

Este fue un panorama general de mi paso por Grupo Sipse, donde conocí y traté a don Andrés Garcia Lavín, un gran ser humano, a sus hijos y a ejecutivos, técnicos y personal administrativo.

En mi próxima entrega recordaré mi paso por el Diario de Yucatán y los excelentes periodistas con los que trabajé en esa casa editorial.

En la foto que ilustra este texto, del archivo de mi buen amigo Paco Chí, nos encontramos en un rancho donde alguna vez mi padre fue copropietario. Además de Paco, oculto parcialmente aparace el buen Jesús Delgado Centeno.

Saludos y hasta la próxima.