- La Vieja Guardia

Un mundo infernal con cielos de titanio

Fecha: 16 sep 2017

Los exoplanetas del tipo Júpiter caliente se parecen mucho al mundo de nuestro sistema solar del que toman su nombre –la mayoría de ellos tienen una masa similar o mayor que la suya–, pero se encuentran considerablemente más cerca de sus respectivas estrellas: mientras que Júpiter se halla a 750 millones de kilómetros del astro rey, estos objetos están situados aún más cerca de sus soles que Mercurio del nuestro. Por ello, presentan unas temperaturas muy elevadas, y de ahí su denominación.

WASP-19b, a 815 años luz, es uno de estos mundos extrasolares. En 2009, se anunció la existencia de este cuerpo, algo más grande que Júpiter, que completa una vuelta completa a su estrella en menos de 19 horas. Pues bien, ahora, un equipo de investigadores de distintas instituciones coordinado por Elyar Sedaghati, un astrónomo de la Universidad Técnica de Berlín y el Observatorio Europeo Austral (ESO), ha descubierto por primera vez óxido de titanio en su atmósfera.

En busca de agua

Un artículo publicado en 2013 en The Astrophysical Journal ya planteaba que esta podía contener agua. Las observaciones realizadas con el telescopio espacial Hubble sugerían la presencia de este compuesto. No obstante, el estudio realizado por Sedaghati y sus colaboradores ha permitido conocer con más precisión la composición química, temperatura y presión atmosféricas de WASP-19b.

Para determinarlas, estos expertos emplearon el espectrógrafo FORS2, un instrumento instalado en el conjunto de telescopios Very Large Telescope –Telescopio Muy Grande o VLT– que la ESO mantiene en el cerro Paranal, en el norte de Chile. En un comunicado hecho público por este organismo, se explica que cuando WASP-19b pasa por delante de su estrella, parte de la luz de esta pasa a través de la atmósfera del planeta y deja huellas sutiles en la radiación luminosa que finalmente llega a la Tierra. De ese modo, los astrónomos ratificaron la presencia de pequeñas cantidades de agua en su cubierta de gases, que se encuentra unos 2.000 grados centígrados, y comprobaron que esta contenía trazas de óxido de titanio y sodio. El hallazgo, detallado en la revista Nature, también corrobora la existencia de moléculas compuestas por elementos pesados en estos objetos, algo que aún no había sido convenientemente confirmado.

Un trabajo meticuloso

“Detectarlas no ha sido fácil. No solo es necesario contar con datos de gran calidad; también se precisa llevar a cabo un análisis minucioso”, explica Elyar Sedaghati. “Para llegar a estas conclusiones, hemos empleado un algoritmo especial que explora millones de espectros. Estos abarcan una amplia gama de composiciones químicas, temperaturas y propiedades”, señala.

Una de las hipótesis que barajan los astrónomos es que en las atmósferas de los planetas calientes como WASP-19b, el óxido de titanio puede funcionar como un sistema de absorción del calor si se encuentra en cantidades lo suficientemente grandes. En esencia, evitaría que entre o salga a través de la atmósfera, lo que provoca una inversión térmica: la temperatura es más alta en la atmósfera superior y más baja en zonas inferiores, lo contrario de lo habitual. El ozono juega un papel parecido en la Tierra.

Los investigadores esperan que este hallazgo permita avanzar en el estudio de los exoplanetas, especialmente de aquellos posiblemente habitables.

Fuente: Muy Interesante.